Gobernanza de datos o Data Governance: el desafío de maximizar el valor de los datos

Dado que los datos ocupan un lugar central en la toma de decisiones, su obtención, clasificación y análisis constituye uno de los pasos más importantes a la hora de optimizar las operaciones y el desempeño general de un negocio.

         Similar a un faro marítimo cuya señalización sirve de guía a los navegantes disipando la oscuridad, la Gobernanza o Gobierno de datos ofrece un enfoque global cuya finalidad es brindar orientación a los usuarios en el creciente maremágnum de datos. Se trata de un sistema holístico orientado a coordinar personas, procesos e innovaciones en vistas a maximizar el valor del dato como activo y agilizar su transformación en información significativa. De este modo, el Data Governance propone la implementación de una serie de prácticas, normas y/o políticas, que garantiza la disponibilidad, calidad, coherencia, confiabilidad y seguridad de los datos en el seno de una empresa.

        Algunas de las interrogantes centrales que la Gobernanza de datos debe ser capaz de responder son las siguientes:

  • ¿Cuánto se sabe sobre los datos disponibles?
  • ¿Cuál es la procedencia de los datos que se emplean?
  • ¿Quiénes son los responsables de velar por su adecuado uso?
  • ¿Cuán útiles resultan los datos para el logro de los objetivos de la empresa?
  • ¿Cuáles son los procedimientos apropiados para que su uso sea realmente óptimo?

Debido al apogeo de innovaciones de punta como el Big Data, Inteligencia Artificial, Machine Learning, Internet de las cosas y Cloud Computing, cada vez resulta menos complejo establecer una Gobernanza de datos eficiente. No obstante, se trata de una tarea que exige la participación de profesionales avezados en la materia, capaces de abordar exitosamente las distintas etapas de su desarrollo, como por ejemplo:

  1. Maximizar la disponibilidad de activos de datos.
  2. Crear los roles, responsabilidades y reglas en el uso de la información.
  3. Velar por la integridad de los datos como activo real.
  4. Diseñar y optimizar una plataforma de verificación de la información.
  5. Asentar las bases de la organización en datos fidedignos.
  6. Desarrollar mecanismos de retroalimentación para mejorar este proceso.

No caben dudas de que la implementación de la Gobernanza de datos requiere tiempo y esfuerzo. Sin embargo, aplazar esta decisión puede traer aparejadas consecuencias desfavorables para una empresa, como desaprovechar las oportunidades de negocio o, peor aún, permanecer al margen de los retos cambiantes que impone el mercado actual.