Chief Data Officer, líder en la transformación empresarial suscitada por los datos

A medida que las empresas toman conciencia del creciente impacto de los datos en el mundo de los negocios, más ejecutivos deciden incorporar nuevas figuras en la mesa directiva, como es el caso, precisamente, del Director de datos.

El Chief Data Officer, o Director de datos, es el responsable de definir, desarrollar y ejecutar los criterios, métodos y procesos a través de los cuales una empresa adquiere, analiza, administra y gobierna sus datos. Al tratarse de la máxima autoridad en la gestión del dato como activo corporativo, detenta la potestad de decidir qué datos pueden usarse, cuándo, cómo y para qué. De este modo, el Chief Data Officer tiene la responsabilidad de validar las tecnologías que se emplean, asegurar y consensuar la trazabilidad del dato, y verificar la efectividad de su aplicación en los negocios.

Sin embargo, dada la versatilidad de su formación y la especificidad de sus tareas, aún no hay consenso claro acerca de cuál debe ser la posición exacta de un Director de datos dentro de una organización. Ubicado a mitad de camino entre el ámbito tecnológico y la esfera económica, en algunos casos, su perfil puede estar más asociado a las TIC, mientras que en otros, al mercado. En el primer caso, el Chief Data Officer puede enfocarse casi exclusivamente en los procesos y calidad del dato. En el segundo caso, su atención puede estar más centrada en el uso de los datos para la toma de decisiones de negocio.

Ahora bien, más allá de su perfil fuertemente multifacético, es indudable que el puesto de Director de datos se encuentra en una espiral ascendente que cada día adquiere mayor relevancia. En efecto, aunque se trata de una figura reciente en el mundo empresarial, que tiene menos de dos décadas de historia, sus proyecciones a futuro son indudablemente promisorias. En la actualidad, contar con un Chief Data Officer constituye una obligación para aquellas empresas que deseen generar ventajas competitivas y maximizar el uso de los datos, no sólo para entender mejor el mercado, sino también para optimizar los procesos y sistemas dentro de la propia organización.

No es casualidad que, de acuerdo a estimaciones del prestigioso Grupo Gartner, para el año próximo el puesto de Chief Data Officer podría alcanzar una posición crítica en la mesa directiva de más del 75% de las grandes compañías.